Seguro que usas bicarbonato sódico en la cocina, como ingrediente de muchas recetas de repostería. ¿Pero sabías que este producto natural, seguro y barato sirve además para apagar incendios, eliminar malos olores, lavarse los dientes y quitar manchas? Descubre aquí los mil usos del bicarbonato.
Aunque es una sustancia natural, también se fabrica industrialmente mezclando gas carbónico con carbonato de sodio. Esto es lo que encontramos en el supermercado: un polvo blanco y cristalino que no desprende olor y que viene envasado en cajas o botes.
El bicarbonato tiene muchos usos insospechados: la industria farmacéutica la usa en medicamentos efervescentes, la industria agrícola como aditivo de alimentos, y la industria petrolera como....¡antidetonante! Pero aquí nos concentraremos en los usos domésticos de este polvillo tan versátil.
Al no ser combustible, no es susceptible de prender fuego.
No es tóxico, por lo que no supone un peligro para niños ni mascotas.
No mancha: al contrario, elimina muchas manchas.
No tiene un fuerte olor y no ataca las vías respiratorias como los productos limpiadores más comunes.
Es versátil: lo mismo sirve para cocinar que limpiar que desodorizar.
Se puede encontrar en cualquier tienda de alimentación o droguería.
Es muy barato.
LIMPIEZA DEL HOGAR
El bicarbonato es una sustancia alcalina, lo que significa que es capaz de disolver la grasa cuando se combina con agua. Utilizado en seco o en un paño ligeramente húmedo, sus propiedades abrasivas hacen que sirva para restregar superficies sucias, igual que si utilizáramos un estropajo pero con la ventaja de que el bicarbonato no raya.
De esta forma se puede limpiar todo tipo de superficies: metal, plástico, tela, esmaltes...lo mismo sirve para limpiar la bañera que un sofá, una alfombra, un recipiente de plástico o un muñeco de peluche.